Un padre presente y activo es una figura central en la vida de un hijo. La paternidad es la relación que los hombres establecen con sus hijos en el día a día, donde intervienen factores sociales y culturales, que van cambiando a lo largo del ciclo de vida.

Los padres tienen que tener una relación afectuosa con los hijos, que vaya más allá de proveerles económicamente, hay que tener un vínculo cercano, ofrecerles cuidado, educarlos con un buen trato, fomentar y mantener el diálogo continuo, enseñarles con el ejemplo, transmitirle valores, respetar a la madre y la familia; ser padre es un trabajo de tiempo completo.

Ser un papá activo y presente es:

• Participar del cuidado diario de su hijo.
• Ser responsable junto con la madre de la crianza, compartiendo las tareas domésticas y cuidados (alimentar, vestir, pasear, jugar, bañar, etc.) de su hijo.
• Estimular el desarrollo de su hijo en todas las etapas de su vida.
• Tener una relación afectuosa (palabras y gestos) e incondicional con su hijo.
• Criar de manera respetuosa, sabiendo poner límites pero siempre con buen trato al menor.
• Ser un papá presente si implica proveer económicamente, pero no solo es eso, es mucho más.

Hoy en día muchos padres están al cuidado, protección y educación de sus hijos; ya sea porque la madre trabaja, porque no está en el hogar por diversos motivos, o porque falleció; pues les toca a los padres hacerse cargo de su salud, alimentación, educación, protección, entre otros.

La paternidad activa es de vital importancia para construir vínculos fuertes y duraderos con sus hijos, los involucra como cuidadores de sus hijos y esto es beneficioso para ellos, ya que los ayuda en su desarrollo social y emocional, lo que genera que tengan relaciones más sanas en su etapa adulta.

Es importante organizar los tiempos con la madre para que ambos puedan cumplir con sus responsabilidades laborales de igual forma, ningún trabajo es más importante que el otro.  Y aun siendo padres separados, la comunicación entre ambos no tendría que ser negativa, siempre pensando en lo mejor para los hijos.

¿Qué beneficios tiene para el niño una paternidad activa?

• Se desarrolla más sano y equilibrado a nivel emocional.
• Menos sobrecarga para la madre, ya que las tareas son compartidas.
• Se siente más realizado con su vida porque disfruta a su hijo y creces como ser humano.
• El vínculo con su hijo será más sólido a través del tiempo y de mejor calidad.
• Un padre presente activo en la infancia, favorece a una adolescencia más estable.

¿Qué consecuencias tiene la ausencia de un padre?

Muestran trastornos emocionales diversos en la adolescencia porque no encuentran una identidad, entre ellos se pueden mencionar:

• Inseguridad, poca confianza en sí mismos.
• Dificultad en la toma de decisiones.
• Tienden a la soledad.
• Caen en relaciones disfuncionales, son adultos dependientes en exceso.
• Algunos se deprimen.
• Autoestima poco saludable.
• Fracaso escolar.
• Consumo de drogas o de alcohol, u otras adicciones.
• Trastornos o problemas de conducta.
• Desconfianza en los demás, lo que afecta sus relaciones interpersonales.

Tengamos esto siempre presente, un niño está solo cuando los padres no están en casa, pero también está solo cuando los padres aun estando en casa no comparten tiempo con él; dejarlo viendo TV, darle el celular o tableta, eso es como dejarlo solo.  Si lo que se busca es que tu hijo sea a futuro un adulto sano, dedícale tiempo a diario, escúchalo y demuéstrale mucho tu amor incondicional.